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Después de un largo silencio del Gobierno española acerca del predominado “caso Gali”, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, salió a comentar sin explicar lo que está pasando en las fronteras de Ceuta ni las causas de esta crisis migratoria.
Marlaska ha anunciado este martes que ya han sido devueltos a Marruecos 2.700 de los 6.000 inmigrantes que han entrado en las últimas horas de forma ilegal en Ceuta, según EFE.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Marlaska ha asegurado que el Gobierno está poniendo desde el primer momento todos los medios necesarios para proteger a la ciudadanía de Ceuta y devolver «por los cauces establecidos» a quien están entrando de forma ilegal en la ciudad autónoma.
«Ceuta es tan España como Madrid, Sevilla o Barcelona», ha aseverado el ministro, que ha subrayado que el Ejecutivo «no va a cejar ni un minuto» para revertir la situación y seguirá «siendo contundente en la defensa de las fronteras».
Cabe recordar que Marlaska rechazó tajantemente la decisión del Gobierno español al acoger a Brahim Gali, pero al final la última palabra la tuvo el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.